Los Q'ero, parte de la nación quechua, buscaron refugio en las montañas entre los 1.400 y 5.000 metros de altitud, para preservar el conocimiento ante la llegada de los conquistadores.
La Nación Q'ero se encuentra ubicada en la provincia de Paucarambo, región Cusco, está integrada por las comunidades: Hatun Q'ero, Q'ero Totorani, Japu, Quico y Marcachea; aunque originalmente fueron ocho comunidades, pero por efecto de la migración, tres de ellas desaparecieron.
Son considerados Hijos de la Luz, ya que esta nación cusqueña escondida en las montañas ha preservado las costumbres del Tahuantinsuyo (Imperio Inca), logrando por ello obtener el título de Patrimonio Cultural de la Nación del Perú (21 de Noviembre de 2007).
Ellos han vivido en sus aldeas en lo alto de los Andes, prácticamente aislados del Mundo, y allí estuvieron durante 500 años, custodiando el conocimiento original y la sagrada profecía sobre un gran cambio (Pachacuti), esperando el momento en que este mundo, daría un giro, retornando la armonía y poniendo fin a la época de caos y desorden.
Para los Q´ero, todo el mundo es consciente. Todo en la naturaleza está considerado como un ente vivo y receptivo. Todo tiene espíritu: el ser humano, la tierra, el sol, la luna, las montañas, las estrellas, los animales… son solo diferentes formas del Kausay (energía viviente) y la tradición enseña cómo vivir esta relación de manera consciente.
Ellos también nos dicen que, el Amor y la Compasión serán las fuerzas que guiarán la unión de los pueblos y que las puertas entre los mundos se están abriendo otra vez y que se forman agujeros en el tiempo que podremos atravesar para explorar nuestras capacidades y recobrar nuestra naturaleza luminosa.
Cuando suficientes semillas estén despiertas, liberadas del miedo y otros aspectos negativos del tercero y cuarto nivel de conciencia, las semillas del quinto nivel podrán brotar dentro de la humanidad y formar un todo.
Súmate a crear tu realidad,
tu acción tiene el poder de cambiar el Mundo.
'Creando mi Realidad', un curso iniciático donde aprendemos de manera teórico-práctica cómo funcionan los planos físico, energético y simbólico y como usarlos para la creación de nuestra propia realidad. La base de esta enseñanza es la existencia y el propósito, la liberación del ser humano, el respeto y la interrelación entre diferentes formas de materia y energía de las que nos alimentamos.
Aprendemos cómo movernos dentro del mundo físico a través de diferentes programaciones que le damos al mundo material. También aprendemos los códigos andinos y la aplicación de los mismos, y los activamos a nivel ritual.
- Reconocemos nuestra existencia
- Rompemos deudas y ampliamos nuestro valor y crédito interno
- Aplicamos el mundo energético a lo cotidiano
- Aprendemos a realizar construcciones metafísicas
- Aprendemos a movernos en el mundo simbólico y acceder a nuestro inconsciente
- Aprendemos a identificar y trascender esfinges y limitaciones
- Desarrollamos un plan iniciático para ordenar nuestro psiquismo
